Beneficios de la meditación y la atención plena en el rendimiento académico
Cada vez son más las personas que ingresan en el mundo de la meditación para mejorar su condición de vida. Está científicamente comprobado que este tipo de prácticas permiten que las personas puedan ver beneficios en aspectos de su cotidianidad muy variados como la alimentación, el descanso y el funcionamiento de su cuerpo.
La meditación y los estudios también están relacionados, y muchas personas llevan adelante esta práctica para mejorar su rendimiento académico. Si te interesa conocer de qué se trata, en este artículo veremos cómo se puede desarrollar la meditación para estudiantes y algunos consejos para mejorar la atención plena en una clase. ¡Comencemos!
¿Por qué es importante considerar la meditación durante los estudios académicos?
Hay ocasiones en las que los estudiantes deben afrontar situaciones estresantes: desde contar con poco tiempo para estudiar, hasta comprender todos los conocimientos de una materia o tener dificultad a la hora de concentrarse. Aunque para muchas personas la meditación y los estudios no combinen, la realidad es que en estos casos es una práctica más que recomendada.
El mindfulness o atención plena se recomienda realizar antes de comenzar una jornada educativa, ya que la meditación puede mejorar la concentración en el estudio. Esto sucede, entre otras cosas, porque prepara a nuestro cerebro para lo que vendrá, permitiendo aumentar la concentración.
Reduce el estrés
Meditar reduce los niveles de estrés que puede sufrir una persona, ya que la actividad aumenta la producción de dopamina y serotonina en nuestro cerebro, las cuales están relacionadas con el placer y el bienestar. De esta manera, la meditación para estudiantes es fundamental para contar con atención plena en una clase.
Alejado de ese sentimiento de nervios o colapsado por la cantidad de cosas que se deben aprender en determinado tiempo, el estudiante podrá estudiar de manera más serena, tranquila y abierta, por lo que será mucho más sencillo que cada uno de los contenidos puedan ser comprendidos. Así, la meditación para combatir el estrés académico es fundamental, como también conocer algunos ejercicios para combatir la ansiedad.
Mejora la memoria
La meditación para mejorar el rendimiento académico tiene muchos beneficios, y uno de ellos es que mejora la memoria del estudiante que la práctica, ya que incrementa las habilidades de la memoria visual-espacial y además, aumenta la capacidad humana de retener información.
¿Cómo la meditación y la atención plena mejoran el rendimiento académico?
Como vimos, la meditación para mejorar el rendimiento académico existe y está recomendada por los profesionales, ya que otorga ciertos beneficios y ventajas que permiten tener atención plena en una clase y que se puedan cumplir cada uno de los objetivos. Veamos más ejemplos:
Aumenta la concentración
Un problema actual en la educación es que a la mayoría de los jóvenes no les gusta leer, y esto se debe muchas veces a que no entienden lo que leen. Un distractor importante en este punto son los propios pensamientos, que se entrometen con la lectura e impiden la concentración.
Combinar la meditación y los estudios nos ayuda a controlar los pensamientos, aumenta la concentración en la lectura y con ello la comprensión, lo que favorece a que el joven le comience a tomar el gusto. En resumen, la meditación otorga quietud mental y control, claves a la hora de enfrentar un momento de estudio.
Mejor rendimiento
Tener una buena autoestima también es clave para poder rendir en el ámbito académico, y para ello existen diversas prácticas que puedes realizar, como meditar en el aula. Un estudiante alegre, positivo y en paz, podrá estudiar las horas necesarias, descansar lo suficiente y lograr cada uno de sus objetivos, por lo que es fundamental que conozcas algunas prácticas mindfulness que puedes desarrollar.
Mejora las conexiones mentales
La meditación para combatir el estrés académico también mejora nuestra capacidad de relacionar conceptos, la comprensión lectora y hasta la elaboración de esquemas. Esto sucede porque la meditación aumenta los «factores neurotróficos», que son claves en las conexiones neuronales de cualquier persona.
Bienestar físico
Otra de las maneras en que la meditación puede mejorar la concentración en el estudio, es por el cambio en el bienestar físico que experimenta la persona que desarrolla la práctica. Al sentirse más tranquila y libre, la persona evita las tensiones, dolores del cuerpo y malos hábitos como los atracones y el consumo de tabaco, factores que colaboran a un mejor bienestar para el momento de prestar atención en lo académico.
Mejora las relaciones con los compañeros
La meditación para estudiantes también es fundamental a la hora de lograr un equilibrio en las relaciones con las otras personas, lo que será de gran ayuda al momento de realizar trabajos en grupo, por ejemplo. Tener equilibrio, armonía y estar abierto a las relaciones personales, permitirá que el proceso educativo sea más sencillo y relajado, por lo que es recomendable realizar este tipo de ejercicios como meditar en el aula.
Consejos, tips y recursos para practicar el mindfulness siendo estudiante
Como vimos anteriormente, la meditación y los estudios otorgan grandes ventajas a quienes la practican con regularidad, por lo que saber de qué manera puede desarrollarse te permitirá que puedas practicarla y conseguir resultados increíbles.
Encontrar un espacio confortable
Una cuestión a tener en cuenta para poder realizar una meditación para mejorar el rendimiento académico es conseguir un espacio cómodo, que no tenga demasiadas distracciones y en el que puedas conseguir calma. Una gran recomendación es que estés solo y que elijas los elementos que mejor te hagan sentir: un almohadón, una colchoneta, una melodía suave, y hasta algún aroma que te reconforte.
Dejar el celular a un lado
Sin dudas la meditación para combatir el estrés académico requiere que puedas alejarte de aquellos dispositivos que te puedan desconcentrar y llenar de información externa. El celular puede generar nervios, estrés y ansiedad en casos en los que debas rendir un exámen o cumplir con obligaciones académicas, por lo que es fundamental que puedas dejarlo en un lugar alejado de ti durante el proceso.
Elegir tu propio método
Cada persona puede tener un modo diferente para conseguir una atención plena y meditación en la formación continua, por lo que debes lograr elegir la perfecta para ti. Existen diversos tipos de meditación: desde una repetición mental o en voz alta de un mantra, o hasta enfocar la atención en la respiración. Lo más importante es que cada vez que tus pensamientos se corran de tu objetivo, puedas volver a relajarte y concentrarte.
Conclusión
En este artículo profundizamos en la relación de la meditación y los estudios, y la importancia de poder realizar este tipo de prácticas para conseguir atención y un buen rendimiento académico.
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