¿Qué es el buttercream? Técnicas de decoración para tus pasteles
La pastelería cuenta con algunas de las artes culinarias más fascinantes, en especial, aquellas destinadas a la decoración. Éstas requieren de una gran destreza con los utensilios y creatividad para lograr que los postres se vean increíbles y deliciosos, además de facilitarte el trabajo y darle un toque de experticia.
Una de las más utilizadas y sencillas de hacer es el buttercream o “crema de mantequilla”. Esta deliciosa mezcla se ha utilizado en la cocina desde el siglo XIX y según el uso que se le dé en el pastel puede realizarse con distintas consistencias.
Pero, ¿qué es, cómo se hace y cuáles son sus tipos? Esto y más te contaremos en el siguiente artículo.
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¿Qué es el buttercream?
Lo primero que debes saber es que esta crema se encarga de darle el sabor característico a muchos pasteles que más te gustan. Fue creada en Reino Unido, y es por esto que la verás como el ingrediente primordial en muchas recetas anglosajonas.
En palabras simples, es una crema dulce hecha a base de azúcar glass (también conocida como impalpable) y mantequilla usada para la cobertura, los rellenos y la base adherente en los pasteles.
Principalmente se elabora utilizando dos ingredientes básicos: mantequilla y azúcar. Otro elemento importante, aunque no vital, es la leche, la cual dota de cremosidad y suavidad. Sin embargo, cada pastelero, según el perfil de sabor que desea lograr, añade otros ingredientes como colorantes, pues el resultado de la mezcla original es un amarillo pálido.
¿Qué diferencia hay entre el buttercream y el frosting?
La realidad es que más que diferencias, el buttercream y el frosting tienen mucho en común. Ambas son coberturas dulces utilizadas en la repostería para decorar pasteles, galletas y cupcakes. En su elaboración se debe utilizar azúcar.
La gran diferencia entre la crema de mantequilla para decorar pasteles y el frosting, es que en la primera el ingrediente clave es la mantequilla, mientras que para la segunda opción se utiliza queso crema.
Tipos de buttercream
La crema de mantequilla tiene sus variaciones según el país en el que se realice, pero no varía el uso que se le da. A continuación, detallaremos algunas de estas para que las tengas presentes al momento de elegir la cobertura y el relleno para tus postres caseros.
Buttercream americano Estilo americano
En el buttercream americano se usa mantequilla y azúcar glass, aunque en ocasiones se puede usar un poco de leche o queso crema para darle cremosidad. Suele dársele más sabor cuando se incorpora ralladura de limón, esencia de vainilla o cacao para buttercream de chocolate.
Buttercream italiano o de merengue italiano
A diferencia de la versión americana, en este se realiza primero un merengue italiano con claras a punto de turrón, y se les añade almíbar para darle estabilidad, cremosidad y reducir el dulzor. Todo esto ayuda para tener una base más balanceada y fácil de manejar. Luego se incorpora la mantequilla en la batidora. Esta versión es la de mayor dificultad.
Buttercream suizo o de merengue suizo
El buttercream suizo es similar al italiano, pues en este se realiza un merengue suizo con claras de huevo. Puede prepararse colocando estas claras a baño de maría junto con el azúcar. Cuando la temperatura haya descendido, se baten hasta tener un merengue con picos suaves. Finalmente se incorpora la mantequilla a la batidora, igual que en el buttercream italiano.
¿Cómo hacer buttercream?
Es una técnica relativamente sencilla, tanto como preparar alguna de las variedades de merengue que existen. Aunque se puede preparar manualmente, se recomienda utilizar una batidora electrónica para mayor practicidad.
Solo debes mezclar bien el azúcar (previamente tamizada) con la mantequilla a temperatura ambiente y con unas cucharaditas de leche. ¿Cómo saber si está lista? Cuando consigas una mezcla homogénea, de textura suave y con gran volumen.
Si deseas lograr el buttercream perfecto, estos consejos te pueden ayudar:
- Si en algún momento notas que tu buttercream suiza o italiana se separa, no te preocupes, sigue batiendo a una velocidad media hasta que adquiera una textura homogénea. Esto es algo normal por el choque de temperaturas.
- Siempre bate tu merengue hasta que la temperatura baje. Esto ayudará a que se integre mejor la mantequilla y consigas un buttercream más estructurado.
- Nunca batas demasiado tu merengue o a una velocidad muy rápida, pues podría sobre batirse y su apariencia no será nada agradable.
- Para tener una buttercream más lisa y sin tanta burbuja de aire, usa el aditamento de pala de tu batidora. En caso de querer más volumen usa el aditamento de globo.
- Tus buttercream las puedes congelar o refrigerar. Esto te ayudará a adelantar el trabajo y poder utilizarlo en cualquier momento.
- Si deseas pintarlo, te recomendamos emplear colorantes en gel, ya que se emplea menor cantidad y no aumentará la humedad de la preparación.
Técnicas para decorar con Buttercream
Pasteles degradados
Los pasteles decorados con buttercream están en tendencia. Puedes utilizar un solo color o realizar diferentes tonalidades para dar un efecto degradado.
Lograrlo es muy simple: primero se cubre el pastel con el tono base, luego se añade crema de un color más intenso en la base y otro con un tono medio al centro. Con ayuda de una espátula, se debe alisar la superficie y se quitan los excesos de crema. En este proceso se funden los colores para lograr el efecto deseado.
Estilo cuerda
Esta técnica de decoración se utiliza principalmente en los cupcakes, y para lograrla es necesaria la ayuda de una manga pastelera con una boquilla de número 172 que le dé una textura diferente. La idea es ir haciendo movimientos circulares abiertos o cerrados según lo desees.
Flores de crema de mantequilla
Realizar flores con crema de mantequilla es un clásico de la pastelería y requiere un gran dominio de la manga. Pero sin duda, los resultados son espectaculares tanto en pasteles como en cupcakes.
El secreto está en preparar el buttercream con la consistencia justa para que la forma no se pierda. Se pueden emplear colorantes para darle más vida a la decoración.
Rosas, tulipanes, peonías, crisantemos y suculentas son las flores más comunes en este tipo de preparaciones, pero en realidad no hay límites cuando se habla de creatividad.
¿Cómo conservar el buttercream?
Ahora que sabes cómo hacer buttercream, es importante conocer este punto. Se puede conservar en la nevera hasta por dos semanas, y siempre que se guarde en un recipiente completamente hermético. Si lo usas con frecuencia, puedes hacer grandes cantidades, colocarlas en diferentes envases y congelarlas.
En caso de que elijas congelar, es mejor que primero la pases unos minutos por la batidora para que recupere su consistencia.
En definitiva, el buttercream es una técnica sencilla de aprender, y con la que mejor se pueden lograr lindas decoraciones. Es la manera más simple de añadir capas de textura y sabor a tus pasteles.
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