¿Cómo cuidar la zona T del rostro para una piel firme y luminosa?

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mujer con la zona t del rostro marcada

El cuidado de la piel del rostro es clave para mantener su firmeza y luminosidad por más tiempo. La rutina de skincare puede variar según las necesidades de cada persona, por ejemplo, el tipo de piel y su edad. Pero además, también es importante entender que no todas las zonas del rostro requieren de la misma atención o cuidados. 

Por ejemplo, el área de los ojos o la conocida zona T de la cara son más delicadas, y no es menor entender qué tipos de tratamiento necesitan. Las impurezas del ambiente y el paso de los años pueden ir generando alteraciones cutáneas y otras modificaciones que no son propias de un rostro tonificado y saludable.

En el siguiente artículo hablaremos acerca de qué es la zona T, por qué es tan importante esta parte del rostro, así como algunas opciones de alimentos y rutinas que puedes utilizar para mejorarla. ¡Lee más!

¿Qué es la zona T del rostro?

La zona T de la cara es la parte centrofacial que compone la frente, nariz y barbilla, reconocida principalmente por ser una de las zonas del rostro que produce y concentra la mayor cantidad de glándulas sebáceas. Sin importar si contamos con un tipo de piel normal, seca, grasa o mixta, el exceso de sebo en este espacio hará que sea mucho más propenso a comedones, espinillas, pápulas y otras afecciones cutáneas.

El exceso de producción de grasa en las distintas zonas del rostro y, específicamente en lo que es la zona T, puede deberse a distintas causas, principalmente:

Un cambio hormonal

Estas alteraciones se presentan en diversas etapas de la vida, por ejemplo, la pubertad, el embarazo, la lactancia, o el periodo o en la menopausia.

La mala alimentación

Una alimentación poco saludable con alimentos altos en grasa, azúcares o procesados es otra determinante que provocará un exceso de lípidos o sebo en la zona T de la cara. Por esta razón, será importante desarrollar una dieta con alimentos que proporcionen beneficios al organismo y ayude en los cuidados de la piel de la cara. La contaminación del ambiente, el uso de medicamentos, el exceso de limpieza y algunos cosméticos son otras posibles causas que alteran la estructura de lo que es la zona T.

¿Cómo cuidar la zona T para una piel firme y luminosa?

Los cuidados de la zona T de la cara pueden ser diferentes a los usados en las otras áreas del rostro. Es decir, debemos usar productos especiales para eliminar los residuos de grasa, poros dilatados, piel tirante, escamosa o rosácea y las imperfecciones como los granos. 

Estas son algunos de los hábitos que debes adoptar para mejorar y proteger la zona T de la cara:

Mantén el área limpia

Cuando aprendes cómo cuidar la piel del rostro, entiendes que la limpieza es un paso fundamental. Para ello, deberás lavar tu cara con agua templada, y luego aplicar el producto limpiador que más se adecue a las necesidades de tu piel: gel, leche limpiadora, aceite limpiador, agua micelar o jabón neutro. Recuerda que, como explicamos más arriba, puede que la zona T de tu rostro necesite un producto diferente al resto de tu cara. Aplica un masaje ligero en tu rostro de forma ascendente y enjuaga bien para eliminar los residuos.

Usa el producto adecuado

Destierra la idea de que una limpieza excesiva o el uso de productos abrasivos logrará eliminar el exceso de sebo en las áreas más complicadas. Elige fórmulas suaves e hipoalergénicas, y evita realizar la rutina de skincare más de dos veces al día. A veces, menos es más. 

Evita manipular la zona T con las manos sucias

La zona T de la cara, como ya mencionamos, es un área propensa a la aparición de acné, lo que lleva a querer tocarla con frecuencia. Sin embargo, esto es algo que debemos evitar a toda costa, para no complicar más la condición. En su lugar, puedes utilizar toallitas para el rostro cuando necesites retirar el exceso de grasa o impurezas. 

Exfolia tu rostro

La exfoliación también forma parte de los cuidados de la zona T y otras áreas del rostro. Al igual que la limpieza, debe realizarse con productos especiales para cada tipo de piel, y con una frecuencia no mayor a dos veces por semana. Aplícalo con movimientos firmes que no generen fricción en el rostro, y no olvides colocar luego un serum y una crema hidratante con masajes para devolverle la hidratación que necesita. 

Este proceso es importante para todos, pero especialmente para el cuidado de la piel grasa, ya que ayuda a limpiar en profundidad el rostro, y eliminar las impurezas y células muertas que no se desprenden con la limpieza básica.

No olvides el bloqueador solar

El uso de protector solar se ha convertido en un producto obligatorio en nuestra rutina, y al igual que pasa en los otros pasos, será tu labor encontrar el indicado para los cuidados de la zona T. Si tienes piel grasa, enfócate en bloqueadores oil free, mientras que para piel seca se recomienda uno con efecto hidratante y refrescante. 

profesional cosmetologa realizando un tratamiento facial

Alimentos y nutrientes que pueden ayudar a mantener una piel saludable

Una dieta equilibrada es más relevante de lo que crees cuando buscas cuidar la piel del rostro. Después de todo, el bienestar empieza por dentro. Son muchas las alternativas naturales con las que cuentas para lograr una piel sana y radiante. Conoce algunas de ellas a continuación:

Cítricos

Frutas como el pomelo, la naranja, mandarina, kiwi y fresa son una excelente fuente de vitamina C, considerada un potente antioxidante que ayuda a conservar la firmeza, elasticidad y renovación de la piel.

Zanahoria

La vitamina A de la zanahoria previene condiciones como la flacidez y aparición de arrugas en la piel. Además es considerada como un alimento fotoprotector que disminuye los daños ocasionados por el sol. Puedes consumirla en ensaladas o zumo. ¡Empieza hoy mismo!

Aceite de oliva

El aceite de oliva es otro alimento de origen natural que proporciona grandes beneficios a la piel. Cuenta con un gran porcentaje de vitaminas A, D y E, convirtiéndolo en un excelente reparador de tejidos que previene el envejecimiento, el enrojecimiento de la piel, la inflamación y el acné. 

Agua

Esto no es ningún secreto, pero nunca está de más recordar que la hidratación actúa como otro elemento anti age natural que mejora la apariencia de la piel, haciéndola lucir mucho más saludable. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda tomar entre 1, 5 y 2 litros de agua por día para cubrir las necesidades del organismo.

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Conclusión

Ya sabes cuales son los cuidados necesarios para mantener una zona T saludable: una buena alimentación, la constancia en la rutina de skincare y la correcta elección de productos para cada tipo de piel te asegurarán el éxito. 

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